Más de una vez te habrás preguntado cómo calcular los ingresos de tu evento, ya es mucho más de la cantidad monetaria conseguida. Tus objetivos definirán el diseño de tu evento (no me refiero al diseño decorativo o visual; si no al diseño de la experiencia, a cómo va a suceder todo durante ese rango de tiempo). Y por este motivo, debes definirlos y tenerlos claros antes de continuar con el siguiente paso.
A continuación te detallo los diferentes ingresos (que debes tener en cuenta al definir tus objetivos) que puedes conseguir. Éstos pueden ser ingresos directos o indirectos:
INGRESOS DIRECTOS
Aquellos ingresos que consigues en tu evento de manera inmediata:
- Entradas de tu evento
- Compras de tu producto o servicio en el evento
- Donaciones, aportaciones…
- Ingresos por publicidad
- Patrocinios o sponsors
Pero además, también consideramos ingresos directos los nuevos leads, visitas a la web, visitas a tu espacio tras el evento, clicks a la newsletter, descargas de tus recursos…
INGRESOS INDIRECTOS
Aquellos ingresos no tangibles y más difíciles de contabilizar pero que suponen una repercusión (y/o ahorro) para tu negocio.
- Valoración económica en medios
- Nuevas suscripciones al blog
- Impacto en RRSS: más seguidores, reacciones…
- Mayor visibilidad de tu marca y mejor posicionamiento
- Promoción a través de influencers o prescriptores de tu producto o servicio
- Aumento posterior del interés en tu marca
Una vez tenemos claros cuáles son los ingresos, podemos analizar el ROI (Retorno de la inversión).
Y recuerda:
- Define tus objetivos (¿Cuáles de estos ingresos quieres conseguir y en qué cantidad? Sé muy específica e intenta basarte en KPIs muy concretos).
- Comprueba que tus objetivos son realistas. En el caso de ser muy ambiciosos, puedes dividirlos en varias acciones.
- Diseña tu acción o evento en función de los objetivos. ¿Qué tienes que hacer para conseguir esos objetivos?
- ¡Manos a la obra!
En este caso, el orden SÍ altera al producto. ¡No lo olvides!